La historia comienza centrada en Ana, una enfermera que después de una noche aparentemente normal en su casa con su novio, es testigo en primera persona del amanecer de los muertos. Ana huye de su casa, escapando de su propio novio convertido en zombi. En una sociedad que empieza a sumirse en el caos, se encuentra con un policía y a continuación con un carismático vendedor de televisores -siendo éste el trío protagonista- acompañado por una pareja cuya mujer está embarazada.
Juntos, emprenden el camino hacia un centro comercial cercano, aunque los muertos vivientes, tremendamente rápidos y ágiles, no se lo pondrán nada fácil. Una vez dentro, se encuentran con dos miembros de seguridad del propio centro comercial, liderados por un tercero egoísta e inepto al que no le hace mucha gracia tener compañía, pero finalmente les deja entrar y los nuevos inquilinos terminarán por arrebatarle el mando al comprobar lo peligroso que puede llegar a ser.
Al poco tiempo de estar en el centro llega un camión con más personas vivas. Aunque no lo tienen nada fácil para entrar por los hostiles zombis que abarrotan los alrededores, logran recalar también en el centro comercial, sin embargo, algunos de estos nuevos supervivientes están infectados y tendrán que deshacerse de ellos.
Pasan los días y los problemas y las bajan van en aumento. El grupo decide planear una vía de escape. Refuerzan dos autobuses que se encontraba en el aparcamiento subterráneo del centro comercial y se dirigen hacia el puerto con la intención de marcharse en el barco de uno de ellos hacia alguna isla cercana que puediera ser segura.
Finalmente logran completar el plan, no sin dificultades. Ana, el policía y solo un par de supervivientes más se montan en el yate con dirección incierta. La película termina intercalando los créditos con algunas imágenes que muestran que se quedan sin combustibles ni alimentos y que llegan a una isla pero que también está invadida de una multitud de zombis. Así pues, final abierto e incierto para nuestro mermado y sufrido grupo de supervivientes.
"El amanecer de los muertos" de 2004 es un interesante y afortunado remake de quizá una de las mejores películas de zombis de la historia, "El amanecer de los muertos" de 1978, sin embargo, es complicado encontrar elementos de unión sobre la trama, los personajes y ni tan siquiera sobre la características de los muertos vivientes.
En esta ocasión no hay helicóptero, elemento fundamental en la versión original y quizá se aprovechan menos los recursos de un centro comercial amenazado por unos zombis que se exprimen al máximo y con una clara influencia de películas sobre infectados como "28 días después", aunque sin duda es un elemento innovador en el cine de muertos vivientes como tal hasta la fecha.
La película, aunque no explica demasiado los motivos de la epidemia, nos deja algunas cosas míticas para el recuerdo. Destacamos las interesantes personalidades de los personajes, la relación que tiene el policía con Andy -un superviviente refugiado en la azotea de su tienda de armas situada frente al centro comercial-, el niño zombi que nace de la embarazada infectada o la gran frase de "Cuando no haya sitio en el infierno, los muertos caminarán sobre la tierra" de un telepredicador que curiosamente también aparece en la grabación de 1978.
En definitiva, una gran película, con bastante acción -algunas veces demasiada- y un buen argumento que, a pesar de tratarse de un remake, incorpora numerosos elementos que la convierten en una película totalmente diferente a su antecesora de finales de los setenta.
Trailer (en inglés):
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